Una cirugía de nariz puede realizarse por diferentes motivos. Entre ellos, por motivos estéticos con el fin de corregir la zona nasal; de forma que se adecue de manera estética y armónica con el rostro del paciente. Por otro lado, muchos pacientes buscan realizarse este tratamiento por motivos funcionales -como conseguir una mejor respiración nasal– o reparadores.
Además en el tratamiento está todo incluido:
Este tipo de cirugía permite corregir de forma permanente cualquier zona nasal; como la punta de la nariz.
La intervención, que generalmente se realiza bajo anestesia general o anestesia local, y sedación en caso de punta nasal; remodela los cartílagos y/o los huesos que conforman la nariz. En aquellos casos en los que exista:
Puede ser necesario modificar la forma del tabique nasal o intervenir en los cornetes para conseguir una mejoría en la respiración.
Esta intervención se denomina Rinoseptoplastia. La cirugía de nariz se interviene generalmente a partir de los 16 años. En esta edad es a la que los huesos nasales han finalizado su crecimiento.
Además de este tipo de corrección nasal, existe la Rinomodelación o Rinoplastia sin cirugía. Gracias a la cual podrás conseguir una mejora de la zona de la nariz sin necesidad de intervención
Finalizada la intervención de cirugía de nariz, se coloca un taponamiento nasal durante unas 48-72 horas y una férula externa, habitualmente de escayola durante una semana aproximadamente. El postoperatorio de la Rinoplastia no es doloroso. Es habitual cierta inflamación y hematomas alrededor de los ojos. Suelen remitir gradualmente dentro de las primeras dos semanas.
No obstante, una ligera inflamación de la piel nasal puede persistir durante unas semanas; aunque esto no impide que la mayoría de los operados retornen a su actividad normal en una o dos semanas.Además en el tratamiento está todo incluido: